Diego Rivera, junto con Orozco, Siqueiros, Revueltas entre otros, precursor del movimiento muralista mexicano post-revolucionario. Pintó murales en la Ciudad de México, Chapingo, Nueva York, San Francisco etc. Sueño de una tarde dominical en la Alameda central es una de sus más grandes obras. En ese mural Rivera retrató a la sociedad mexicana de su época enfrentándose a importantes cambios económicos y sociales así como reseñas históricas del parque y de México. Como seña de su admiración Rivera pintó a José Guadalupe Posada y su famosa catrina junto a Frida Kalho y un retrato de él como niño sosteniendo un libro con la leyenda ¨Dios no existe¨, motivo por el cual el mural fue censurado durante buena parte del tiempo que estuvo en el nuevo y lujoso hotel Reforma en la calle del mismo nombre en la Ciudad de México.
Un homenaje de Poetas Urbanos.
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